martes, 6 de enero de 2009

Pobrecito Bolívar / por Óscar Lucien


“¡Dichoso el ciudadano que bajo el escudo de las armas de su mando ha convocado la soberanía nacional para que ejerza su voluntad absoluta!”. ¿Cuántas veces no hemos escuchado esta frase en labios del teniente coronel Chávez para invocar el pensamiento iluminado del Libertador, perversa- mente convertido en artera trampa jaula para la imposición de su proyecto personalista denominado Socialismo del siglo XXI (sic)?. “La esclavitud es la hija de las tinieblas”. ¿Cuántas veces no ha acomodado conveniente- mente esta esclarecedora frase en alguno de sus encendidos discursos? “Unidad, unidad, unidad, debe ser nuestra divisa”. ¿En cuantas ocasiones no se ha utilizado este clamor del Libertador, por allá en 1819 para sacar del caos la naciente República, como latiguillo presidencial para someter a todos sus partidarios a su desmedido celo de control, hoy consumado en su decreto de partido único de la revolución? “Moral y luces son los polos de una república, moral y luces son nuestras primeras necesidades”. ¿Cuántas veces esta convicción pedagógica forma parte de la cháchara que acompaña la inauguración de una escuela bolivariana (que en muchos casos es una casita de las viejas, recién pintada y con las goteras selladas)? “El sistema de gobierno más perfecto es aquel que produce mayor suma de felicidad posible, mayor suma de seguridad social y mayor suma de estabilidad política”. Veinticinco palabras convertidas en consigna política de la revolución, sin duda la frase más repetida, el comodín de uso diario, que incluso comienzan a utilizar sus más cercanos acólitos.
En el sistemático y permanente uso de historia como fuente de un deliberado plan de manipulación político-ideológico en todo instante se encuentra una frase de Simón Bolívar. Todo lo ha dicho, pensado o intuido el Libertador. Recuerdo que en su columna en este diario, en alguna oportunidad, Alberto Barrera Tyska comentaba que, si se busca bien, en algún lugar encontraremos que el Libertador es el creador de la zona franca de Margarita. Para quienes puedan encontrar alguna gracia en esto no sé que efecto pueda producirles que, recientemente, se ha descubierto que de haber tenido tiempo “Bolívar hubiera sido socialista”. Cuestión que, de verdad, a mí no me sorprende porque de igual manera si mi abuela hubiera tenido un manubrio y un par de ruedas hubiese sido una bicicleta.
¿Cuántas veces no nos sentimos agobiados por el empleo recurrente de frases y textos del padre de la patria, arbitrariamente extraídos de su contexto original para justificar una iniciativa del comandante de la revolución bolivariana?
Si algo, efectivamente, me molesta del teniente coronel Chávez es su abusivo y empalagoso uso de las palabras de Simón Bolívar a manera de recetario pret-a-porter. Claro, en lo que le conviene, como ocurrió en su reciente presentación de una supuesta Memoria y Cuenta a la Asamblea Nacional. Fuera de aquí en Venezuela casi todo se llama Bolívar, empezando por el país mismo, llamar Plan Nacional Simón Bolívar a su enceguecido empeño reeleccionista es el más impudoroso acto de impostura y de manipulación del pensamiento del padre de la patria. Y ya les explico por qué. Con el agravante, que ya ha sido señalado por algunos analistas, de que si siempre el pensamiento y obra del padre de la patria fue un elemento fundamental de cimiento social, de unión y de solidaridad entre todos los venezolanos hoy, en virtud del uso de Chávez, se está convirtiendo en fuente de discordia y de confrontación. Sin ir más lejos el hecho que ahora también a la Fuerza Armada Nacional, calificada y autoreconocida como roya rojita, se le quiera cambiar el nombre por el de Fuerza Armada Bolivariana, es un pavoroso ejemplo que pone los pelos de punta.
“¡Dichoso el ciudadano que bajo el escudo de las armas de su mando ha convocado la soberanía nacional para que ejerza su voluntad absoluta!”, son sólo las palabras iniciales del célebre documento conocido como Discurso de Angostura, donde el Libertador dirigiéndose al Congreso de Angostura, el 15 de febrero de 1819, da esclarecida fe de sus ideas políticas democráticas y republicanas. Todas las demás referencias textuales que he citado provienen de ese mismo y esclarecido texto que, como vemos y ha sido reconocido por la historiografía nacional, está pleno de sabias reflexiones de un extraordinario contenido político y filosófico. El teniente coronel suele referirse al Discurso de Angostura, y todas estas frases entrecomilladas se las hemos oído en más de una oportunidad. Hace pocos días se las escuché nuevamente. No recuerdo bien si en el acto de toma de posesión para un nuevo mandato como presidente reelecto (ojo), en el acto de juramentación de los nuevos ministros, en el acto mismo de presentación de la memoria y cuenta en la Asamblea, o con Daniel Ortega en Nicaragua, o con Rafael Correa en Ecuador (en fin, en algún momento porque todos los días está en la televisión).
Al acercarse una fecha conmemorativa del famoso discurso, por curiosidad, y releyendo el famoso texto encontré un párrafo –el párrafo– que nunca se lo he escuchado a Chávez y refuerza mi convicción de que el manipulado uso de las palabras del Libertador tiene una función política deliberada. Dice, también, Bolívar, en el mismísimo Discurso de Angostura que tanto tergiversa el teniente coronel, lo siguiente:
“La continuación de la autoridad en un mismo individuo frecuentemente ha sido el término de los gobiernos democráticos. Las repetidas elecciones son esenciales en los sistemas populares, porque nada es tan peligroso como dejar permanecer largo tiempo en un mismo ciudadano el poder. El pueblo se acostumbra a obedecerle y él se acostumbra a mandarlo; de donde se origina la usurpación y la tiranía. Un justo celo es la garantía de la libertad republicana, y nuestros ciudadanos deben temer con sobrada justicia que el mismo magistrado, que los ha mandado mucho tiempo, los mande perpetuamente”.

1 comentario:

  1. como es que son idiotas... creen q pueden cambiar el enfoque de las palabras de BOLIVAR solo porq sï... deberian verce en el espejo e imaginar lo q pensaran sus nietos cuando quede demostrado q fueron un engaño.. y solo odian al pueblo... porq Bolivar siempre hablo y si no me creen al final del discurso dijo un gobierno eminentemente popular... justicia etc.. yo se que no lo han leido ninuno de ustedes.... dan mucha lastima... poramorsex@hotmail....

    ResponderEliminar